El valioso regalo de Dios, su gracia
Dios extiende su gracia
desde el amanecer hasta el anochecer.
Dios nos toca con su gracia,
pone en nuestros labios sabiduría,
para hablarle al afligido,
para amar al que nada ha tenido.
Dios derrama su gracia
cuando nos permite brillar,
en un mundo de oscuridad
de odio, de maldad.
Dios nos justifica en su gracia,
perdona nuestras culpas,
nos devuelve la alegría,
nos da vida en abundancia.
Foto cortesía de Maxime Perron Caissy
El valioso regalo de Dios, su gracia. Poema cristiano. Dios me da su gracia cada mañana, día, noche. No merezco tanto amor de Dios. Gracia maravillosa de Dios. Gracia que me toca, que no merezco. Jesús me salva por gracia. Dios me salva. Su gracia se muestra en la mañana, tarde, noche. La gracia de Dios es un regalo.